SOPA DE CALABAZA de Helen Cooper es un fantástico cuento con el que hemos disfrutado enormemente en el cole, pero es sobre todo un cuento ideal para leer en la cama, arropaditos entre el edredón en los días del otoño en el que las calabazas son protagonistas.
Sus ilustraciones invitan a la calma y además está lleno de pequeños detalles, como los objetos personales de cada personaje o como unos diminutos insectos que aparecen escondidos en cada página, espiando a los tres amigos. Jugar a encontrarlos junto con papá y mamá es una delicia para niños y niñas...
"En medio de un bosque, en una bonita cabaña viven un Gato, una Ardilla y un Pato. Cada día hacen sopa de calabaza para cenar: el Gato trocea la calabaza, la Ardilla remueve la sopa y el Pato le pone la sal. Viven los tres muy felices, teniendo cada uno su tarea diaria. Pero un día el Pato decide cambiar los papeles, y se arma un gran lío entre los tres amigos…
Este cuento nos enseña lo difícil que es cambiar la organización de una casa y los problemas que puede suponer, y lo que puede sufrir la gente que te quiere cuando te cree perdido. También muestra lo bonito que es el no reprocharse unos a otros por algo que ya ha pasado. Pero lo que prevalece en Sopa de Calabaza es la amistad entre los tres personajes.
Con la lectura de Sopa de calabaza podemos aprender que es tan importante que cada uno cumpla con sus tareas como el respetar las ganas de hacer algo distinto. Además, la posibilidad de perder a un ser querido por no entenderse o por reprocharse algo pasado, no merece la pena."
Fuente: Caricias en cuentos blogspot.com
UN CUENTO SOBRE EL VALOR DE LA AMISTAD
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